YO SOY
ALEJO LUENGAS

Creo que no hay palabras para expresar lo agradecido que estoy contigo. Honestamente, sin ti, nada de esto sería una realidad y yo no sería el piloto y el ser humano que soy hoy en día. Todo, absolutamente todo, te lo debo a ti. Desde el día 1, has estado presente en todo momento y más que un apoyo, eres una inspiración porque sin ti nada de esto tendría sentido. Has sido mi mecánico, preparador, psicólogo, coach y lo mas importante, el mejor papá. ¡Gracias papá, porque gracias a ti hemos logrado lo que hemos logrado y vamos por mucho más!

Gracias por ser esa persona que me ha enseñado que, en la vida, si uno realmente quiere lograr algo, debe tener mucha disciplina y trabajar muy duro. Tú me has inculcado la importancia de esforzarme más que los demás y que, en la vida, si uno tiene un plan bien estructurado, cualquier objetivo se puede lograr. Las cosas tan valiosas que me has enseñado me han ayudado a lograr lo que he logrado hoy en día. ¡Gracias por todo mamá, te amo!

Mi hermano y compañero de vida, simplemente gracias por todo. Siempre has estado ahí apoyándome y siempre has querido lo mejor para mí. Gracias por empujarme más allá de mis límites para sacar lo mejor de mí y hacerme creer que cualquier sueño es posible en la vida. Siempre hemos estado juntos y eso nunca va a cambiar; vamos a lograr grandes cosas juntos y somos un equipo imparable porque siempre estaremos el uno para el otro. Siempre le agradeceré a Dios por darme un hermano como tú.

Gracias por siempre creer en mí y decirme que soy el mejor. Tener una hermana como tú me inspira no solo por el apoyo que me das, sino también porque quiero demostrarte que, si trabajas duro, te esfuerzas y das lo mejor de ti, puedes lograr cualquier cosa que te propongas. Te debo una promesa: llegar a la cima del automovilismo en Estados Unidos, y voy a cumplirla. Te amo.

Víctor, mi bro, la verdad es que tú también eres gran responsable y a ti también te debo gran parte de que yo siga luchando por mi sueño en Estados Unidos. Ese sueño de ganar mi primera carrera en Estados Unidos también se hizo realidad gracias a ti. Siempre has estado conmigo acompañándome a todas las pistas, a todas las carreras y eventos a los que debo ir y, aunque a veces las cosas se ponen difíciles, siempre estás ahí para motivarme y no dejarme caer. Tú ya eres parte de este sueño y juntos lo vamos a lograr. Gracias por todo, bro.